Me estoy esforzando por trabajar en la terraza. Hace una chicharra de infarto y hasta hace escasos diez minutos no ha parado la obra de la esquina, pero para lucir hay que sufrir, y una tiene que coger colorcito para la próxima boda. Colorcito, sí, porque lo de hacer dieta está descartado desde el segundo … Sigue leyendo Villancicos y otros cortocircuitos